Las fuertes lluvias y bajas precipitaciones, aunque incomodan a gran parte de la población, dejan satisfechos a los sectores agrícolas de la región.
En comunas como Villarrica las precipitaciones hicieron estragos en la calles de la ciudad, en la ciudad lacustre se debieron realizar labores de drenaje por los más de 160 milímetros de agua caída, al respecto el encargado de Protección Civil y Emergencias de la municipalidad, Jorge Aranda, comentó que “hubo varias situaciones de gravedad, desbordes de canales en el sector Collico Liumalla, estuvimos también en el sector de Llau Llau, posteriormente nos fuimos a Relún, la alcantarilla de Pichipillan, también en el sector Los Laureles, donde hubo deslizamiento de tierra. Hemos estado recibiendo llamados toda la noche. Hubo más agua de lo pronosticado, por lo que ha sido compleja la situación, pero el personal está trabajando”.
Desde otra perspectiva, el secretario ejecutivo de Sofo, Andreas Köbick, no vio problemas en las intensas lluvias, destacando que “en general para una agricultura exitosa lo más importante es que las estaciones del año se comporten de la forma más acostumbrada posible, las lluvias y bajas temperaturas de estos días no tienen mayor efecto negativo en el agro”.
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