Ohio en la mira del mundo: accidente químico liberó una gran nube tóxica en el globo

Las noticias que llegan desde Estados Unidos no hacen más que confirmar una y otra vez el desastre que ha sido el descarrilamiento de un tren de mercancías en East Palestine, Ohio. El tren transportaba nada menos que 300.000 litros de cloruro de vinilo y otras sustancias que sirven para fabricar teflón y PVC. Todas ellas altamente contaminantes y letales para los seres vivos. El vertido, y posterior incendio, han provocado que los componentes afecten ya a la tierra, las aguas subterráneas y dos ríos que sirven de agua al 22 % de la población norteamericana.

La situación es crítica en Ohio, Estados Unidos. Esto luego de que un tren de mercancías se descarrilara el pasado 3 de febrero. Las condiciones en las que se encontraban las vías férreas del lugar hicieron que el tren se volcará y junto a él, se volcaron también varios carros que contenían productos químicos, como el cloruro de vinilo, sustancia utilizada para la confección de teflones y de PVC.

Las autoridades del estado de Ohio, en su máxima sabiduría, decidieron realizar una “quema controlada” del contenido químico de los carriles accidentados, hecho que finalmente causó una masiva gran explosión que en este momento está siendo comparada con el accidente de la planta nuclear de Chernóbil durante la ex Unión Soviética.